Gran doctor

noviembre 27, 2020

José Guadalupe Rocha Esparza

En la selva, callada y misteriosa de África Central, entre serpientes, gorilas y cocodrilos, habitó un gran hombre franco-alemán, médico misionero de mucha autoridad, lugar donde construyó su hospital de la nada en Gabón, donde atendía enfermos, desde lepra hasta elefantiasis, sitiado por cabras, pericos, mandriles, monos, antílopes y un piano desafinado de 3 toneladas.

Albert Schweitzer estudió filosofía, medicina, teología y música. Conocía de zoología tropical, antropología y agricultura, además de experto carpintero, albañil, veterinario, dentista, dibujante, mecánico y farmacéutico. Políglota, incluyendo hebreo. Concertista de órgano y constructor de barcos Escritor de libros sobre Bach, Jesucristo e Historia de la Civilización. Vegetariano.

Ganador del Premio Nobel de la Paz 1952, por su reverencia, respeto y exaltación de la vida, una vida al servicio de la gente y de cada criatura viva; afirmación por la existencia misma. “Soy un ser vivo y deseo vivir, en medio de seres vivos que desean vivir y quien esté a favor de los animales, que deje totalmente el consumo de carne”, decía. Murió a los 90 años.