Monsieur Voltaire

diciembre 15, 2020

José Guadalupe Rocha Esparza

Entre los grandes pensadores de la Ilustración, pocos fueron tan atrevidos y nada diplomáticos como François-Marie Arouet, más conocido por el seudónimo de Voltaire, escritor francés, estatura pequeña, orgulloso, peleonero, crítico feroz, ocurrente, de bailadora, traviesa y famosa sonrisa, buenos trajes y elegantes carruajes, tipo que “no dejaba títere con cabeza”.

Le enfurecía el poder de las autoridades religiosas para acusar, torturar y ejecutar a laicos que habían infringido leyes eclesiásticas, especialmente el caso de Jean Calas, juzgado por leyes penales no escritas. “Despertad, romped vuestras cadenas. Pensad por vosotros mismos”, decía quien dio alas a la mente humana y preparó hombres libres ajenos a todo fanatismo.

Autor de 99 volúmenes con obras de teatro, poemas, novelas y artículos, así como más de 8 mil cartas a personas famosas, clarificando entre delitos y pecados. Antes de morir a los 84, dijo: “Muero adorando a Dios, amando a mis amigos, sin odiar a mis enemigos y detestando la superstición”. En su agitada vida, transformó la era del fanatismo en una era del raciocinio.