El piloto mexicano acabó en el podio del GP de Gran Bretaña pese a los daños en la primera vuelta y asegura no haberse rendido nunca.
Sergio Pérez acabó segundo en el Gran Premio de Gran Bretaña, pese a tener que parar en las vueltas iniciales por daños en su monoplaza. El mexicano se volvió a meter en la lucha tras el abandono de Ocon y aprovechó al máximo todas sus oportunidades.
Pérez no se rindió en toda la carrera
Sergio Perez sufrió daños tras colisionar con Charles Leclerc en la salida, pese a una gran salida que realizó en los metros iniciales. Eso provocó que el piloto mexicano tuviese que hacer una temprana parada y cambiase toda la estrategia de la carrera.
“Al principio de la carrera, tenía daños bastante considerables en el alerón delantero, por lo que he tenido que parar y al final he salido último”, declaró Pérez al concluir la carrera.
Sin embargo, eso no bajó los ánimos del piloto de Guadalajara, que logró sacar un buen rendimiento con su Red Bull para minimizar daños. Gracias al abandono de Ocon, el cual provocó un coche de seguridad, Pérez se puso cuarto y en plena batalla por la pelea.
“Ha sido una gran remontada por nuestra parte, no nos hemos rendido y hemos seguido empujando. Ha llegado la oportunidad en las últimas vueltas y hemos ido a por ello. Felicidades a toda España y a la familia Sainz. Me alegro de compartir esta victoria con Carlos”, dijo Pérez.
Segundo puesto que sabe a gloria
Sergio Pérez era cuarto en la resalida, teniendo por delante a Leclerc, Sainz y Hamilton. El piloto mexicano tuvo que adelantar primero el heptacampeón del mundo, que venía haciendo una gran carrera, pero eso no le importó.
“Con Lewis sabía que tenía la posición ganada, él no tenía a dónde ir”, concluyó Pérez.
‘Checo’ pudo hacerse con la posición de Hamilton con facilidad y más adelante pasó a Leclerc, quien tenía neumáticos duros usados. Esta posición le sirve al mexicano para recortar puntos con su compañero de equipo en el mundial y alejarse de Leclerc en su batalla por el segundo puesto.
