Aprueban reforma eléctrica criticada por ambientalistas en México

febrero 24, 2021

Los diputados del partido oficialista Morena y sus aliados aprobaron la madrugada de este miércoles una reforma que fortalece a la empresa eléctrica estatal, pero que según especialistas y opositores privilegia las energías fósiles sobre las renovables.

La reforma a la Ley de la Industria Eléctrica fue avalado por 306 votos a favor, 179 en contra y cuatro abstenciones, informó la Cámara de Diputados, que ahora mandará la iniciativa al Senado para su votación.

El proyecto fue impulsado por el presidente izquierdista Andrés Manuel López Obrador, quien en su conferencia matutina dijo que lo que busca es fortalecer a la estatal Comisión Federal de Electricidad (CFE).

Es una empresa «de la nación, del pueblo de México y necesitamos fortalecer a estas empresas para ser independientes y para garantizar que no aumente el precio de la luz», dijo.

Pero partidos opositores, expertos y ambientalistas advierten que esta reforma es un retroceso pues significaría un regreso a las energías fósiles y sería contraria a compromisos internacionales asumidos por México en materia ambiental.

La reforma «da preferencia al uso de fuentes de energía emisoras de dióxido de carbono como combustóleo y diésel, cancela los compromisos del desarrollo sostenible de la ONU e inhibe las posibilidades de buscar mayores y mejores fuentes de abastecimiento», dijo durante el debate la diputada María de los Ángeles Ayala, del opositor Acción Nacional.

La organización ambientalista Greenpeace ha advertido que esta iniciativa «perpetúa un modelo altamente dañino para el medio ambiente, que no combate, sino propicia el cambio climático que el Estado mexicano tiene la obligación constitucional de combatir».

Empresarios y opositores también han señalado que la iniciativa sería contraria a los compromisos de México en el marco del T-MEC, el acuerdo comercial con Estados Unidos y Canadá.

La CFE es la única empresa que provee energía en México, pero en el marco legal actual está obligada a comprar energía renovable a través de subastas.

La reforma eliminaría este mecanismo y autorizaría a la CFE a generar su propia energía recurriendo a combustibles fósiles.