Además de Estados Unidos, la cuenca Asia Pacífico es una región de alto potencial que a pesar de la distancia, ofrece oportunidades inigualables debido a su extraordinario ritmo de crecimiento y diversificación.
Así lo afirma el especialista en temas de comercio exterior, Arturo Pérez Behr, al señalar que China, por ejemplo ha dado grandes muestras de potencial financiero y de expansión de mercado, tanto a la compra como a la venta.
El también ex presidente de la Asiciacion Nacional de Importadores y Exportadores de la República Mexicana (ANIERM), señaló que en segundo término las relaciones con Canadá y Europa Occidental ofrecen oportunidades para la exportación de productos 100 por ciento locales.
El mercado mexicano absorbe un promedio de 1,700 millones de dólares de inversión privada anualmente, de la cual la participación de inversionistas asiáticos (particularmente de China, Corea del Sur, Taiwan) ha provocado una sinergia importante con inversiones del ramo aeroespacial y de productos médicos de capitales europeos, pasando de una participación del dos por ciento del total en 2010 a un 15 por ciento en 2018.
A las ser una prospectiva agregó que Curiosamente, en este campo del intercambio comercial o de servicios, el principal producto de exportación no es un objeto, a nivel nacional sin duda alguna está la gran oportunidad de aprovechar la creatividad de la población joven para vincularla a proyectos sustentables de emprendimiento.
Como región fronteriza, enfrentamos el reto de incrementar de manera sustancial potenciar los esfuerzos al registro de la propiedad intelectual y el encadenamiento de las industrias creativas (diseño, tecnologías de la información).
Dijo que de acuerdo, con la Encuesta Intercensal del Inegi en 2015, a nivel nacional la población de jóvenes entre 15 y 29 años era de 30 millones, de los cuales, 66.8 por ciento, me refiero a 20.44 millones, no asistió a la escuela, dato muy revelador que pone de manifiesto la urgencia de incrementar los apoyos a la vinculación escuela-empresa y hacia la capitación del capital humano.
Sin embargo, no todo es miel sobre hojuelas, existe un sensible desconocimiento sobre apoyos e información clave para la asistencia técnica que fortalezca la oferta exportable bajacaliforniana y de manera particular de Tijuana. Las iniciativas comerciales de México versan en dirigir desde la plataforma municipal, apoyos técnicos y financieros para fortalecer la cadena de valor local y atender de manera anticipada las necesidades de seguimiento con PYMES y emprendedores con vocación exportadora, para capitalizar sus ventajas competitivas. En la ciudad de Tijuana existen más de 80,000 Unidades de negocios, de los cuales el 90 por ciento corresponden al segmento de MiPyMEs y es donde existe el mayor nicho de oportunidad para articular la oferta potencial local hacia nuevos mercados.
Por todo esto, el T-MEC resulta ser la oportunidad de establecer un nuevo marco regulatorio que abre la oportunidad, para el caso de la oferta exportable de nuestra región, hacia nichos de alto valor agregados, gracias al talento creativo del segmento de población joven, el cual es el de mayor peso.
El mercado laboral mexicano sería el más beneficiado con el nuevo tratado, ya que se fortalecerían las normas y derechos laborales para mejorar las condiciones y promover salarios más elevados. Las ventas de México a Estados Unidos se eleven en 3.8 por ciento con la firma del T-MEC, mientras que las exportaciones del vecino a nuestro país crecerían un 6.7 por ciento. Esto equivale a un incremento superior a los 26 mil millones de dólares gracias al intercambio entre ambas naciones.
Hablando de las ventajas, tenemos que mencionar que la ubicación estratégica para el mercado de Norteamérica y la creciente participación de empresas de servicios de soporte al comercio exterior desde Tijuana. El volumen del comercio exterior (exportaciones e importaciones) crecieron más de cinco por ciento durante 2018 y la zona metropolitana de Tijuana tiene la cuarta posición a nivel nacional con mayor volumen de exportación y el segundo lugar en la frontera norte de México.
Para esto, las desventajas se ven reflejadas debido al acelerado ritmo de crecimiento poblacional; el reto de atender la dotación de infraestructura para la integración logística eficiente, el valor agregado al comercio exterior es de apenas en promedio el seis por ciento del volumen total; por lo cual existe una amplia oportunidad de capitalizar una amplia gama de oportunidades.
Por nuestra condición de frontera, este tipo de imposiciones provoca una alta sensibilidad al éxodo de consumidores locales hacia alternativas de lado norte de la frontera, lo cual deriva en el creciente reto de ofrecer alternativas de consumo local a través de la creatividad y diversificación.
En períodos de alto consumo (festividades, etc.) el volumen de compras por parte de connacionales en el condado de San Diego (vecino fronterizo de Tijuana) alcanza los 2 millones de dólares diarios en ventas al menudeo. Estamos hablando de una importante derrama económica que a través del régimen de zona libre podremos capitalizar en algunos rubros a favor del comercio local.
