10 de noviembre de 2017.- La noche de este viernes fue inaugurada en la Sala Felipe Villanueva de Toluca la muestra “Águila Real” de la artista mexicana Carmen Parra, quien continúa con la nueva vocación de la Sala Felipe Villanueva de Toluca: ser un centro cultural que dé cabida a distintas manifestaciones artísticas y un espacio de diálogo entre el arte y el público.
También con el propósito de con de compartir el arte creativo al público asistente a los conciertos que se ofrecen en la sede de la OSEM, la exposición “Águila Real”, conformada por óleos, bajo relieves y tintas sobre facsímiles, podrá ser visitada del 28 de octubre hasta finales de diciembre de 2017, en este espacio de diálogo con la cultura.
La propuesta de la artista ofrece un acercamiento creativo a la majestuosa ave en peligro de extinción y a un nacionalismo hoy desdibujado. Ya que el águila real es un símbolo de la Nación, desde el mito fundacional del mundo prehispánico, hasta nuestro escudo nacional.
La Maestra Parra expone una visión del Águila Real mexicana que representa iconográficamente la idea de que es necesario que el país vuele hacia adentro: hacia sus orígenes y su historia. Además de hacer un paralelismo entre la destrucción ecológica de esta especie con la identidad nacional; concepto que la llevó a realizar el presente trabajo durante dos años.
Carmen Parra, nace en la Ciudad de México y es hija del arquitecto Manuel Parra y de María del Carmen Rodríguez Peña. Artista multidisciplinaria, polígrafa, en 1959 a 1964 comenzó su formación estudiando teatro en la Escuela Nacional Preparatoria número 5 de la UNAM e inició sus estudios de Antropología Social en la Escuela Nacional de Antropología e Historia del INAH.
Estudió diseño gráfico para el cine en el Royal College of Arts de Londres, pintura en la Academia de Bellas Artes de Roma, en 1964, y música en el Instituto Villalobos de Río de Janeiro. Finalmente regresa a México y concluye sus estudios en La Esmeralda. Estas experiencias fueron el punto de partido de su trayectoria creativa y personal, que ha expuesto en nuestro país y en varios lugares del mundo.
A lo largo de su incesante actividad plástica, Carmen Parra ha generado una hermandad con los artistas novohispanos para rescatar su tiempo y su iconografía —altares, espacios arquitectónicos, ángeles, arcángeles, águilas, mariposas y flores cohabitan en su obra. El mundo de El Aire puebla sus sueños. A través de su pincel y de su inagotable imaginación transcribe su experiencia, creando un lenguaje propio. Para Carmen Parra, las raíces de México son sus propias alas: se declara veedora de la Nación.
Es con “Águila Real” que el Patronato de la Orquesta Sinfónica del Estado de México (POSEM), sensible a las necesidades del público y de la propia Orquesta, sigue cumpliendo con el compromiso de la actualización y adecuación de la Sala Felipe Villanueva de Toluca, promoviendo y facilitando que el recinto crezca en su oferta y se convierta en un espacio público cultural abierto a todos.
En los últimos años el POSEM, encabezado por Heberto Guzmán, se ha consolidado reforzando las actividades para no ser sea solamente una fuente de recursos para la OSEM, sino un verdadero impulsor de la cultura y de la participación de las empresas en el fomento de la música.
Tal es el caso de los apoyos brindados para las recientes giras internacionales por China, los Estados Unidos de Norteamérica y Colombia. También su apoyo es fundamental para que la OSEM se presente en los máximos recintos culturales a lo largo y ancho de la República Mexicana, como ejemplo tenemos los exitosos conciertos ofrecidos por la Orquesta en el Festival Internacional Cervantino.
Con el Gobernador Constitucional del Estado de México, Alfredo Del Mazo Maza, el POSEM también trabaja activamente en dotar de infraestructura a la orquesta y en crear nuevos espacios de diálogo cultural, tal es el caso de la reciente remodelación de la Sala Felipe Villanueva de Toluca; comprometido en la actualización y adecuación del recinto, en coordinación con la Secretaría de Cultura mexiquense y con el objetivo de incrementar la interacción de los públicos con la música, construyó la primera biblioteca y fonoteca, física y virtual, ligada a una orquesta sinfónica en nuestro país.
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