El presidente Andrés Manuel López Obrador celebró el “replanteamiento y actitud digna de algunos adversarios que hablaron de la reconciliación”.
“Les tomamos la palabra. Necesitamos la unidad. Si coincidimos en el propósito de que progrese el país con justicia, que haya crecimiento con bienestar, garantizar la libre manifestación de las ideas, el derecho a disentir, que nunca se piense en el autoritarismo sino en las libertades y construir una democracia, nos entenderemos a partir del respeto”, expresó.
Luego de los festejos de la Independencia en el Zócalo capitalino y ante el recibimiento que tuvo de los asistentes, el jefe del Ejecutivo refrendó su compromiso de no fallar al pueblo de México.
“No olvidamos de dónde venimos, por qué luchamos y no nos dejamos atrapar por la parafernalia del poder”, afirmó el mandatario en conferencia de prensa matutina.
Refirió que el ejercicio del gobierno lo lleva a cabo con base en el protocolo republicano, “no el de ‘su alteza serenísima’, sino el de Siervo de la Nación”.
“El poder es humildad y el pueblo de México es extraordinario, le profeso un profundo cariño; no es cierta la versión de que es malagradecido. Amor con amor se paga. Seguiremos trabajando para sentar las bases de la transformación”, remarcó.
Agregó que dedicará a la causa pública los 5 años que quedan de gobierno.
“Deseamos que a toda la gente le vaya bien, que esté contenta, feliz y que cada vez se sufra menos”, enfatizó.
Reiteró que dos de sus principales preocupaciones son pacificar al país y echar a andar la economía para cumplir el compromiso de crecer 4%.
Sobre la liberación de los implicados en la desaparición de los jóvenes de Ayotzinapa, indicó que este mismo fin de semana fijó su postura a través de la Subsecretaría de Derechos Humanos, Población y Migración a cargo de Alejandro Encinas.
Antes de que sucedieran estas liberaciones, el Ejecutivo ya había presentado otra queja por las que antecedieron.
Asimismo, el gobierno federal ha solicitado la intervención de la Fiscalía General de la República, por lo que el próximo miércoles el presidente participará en un encuentro con el objetivo de tratar estos asuntos con representantes de la FGR y del Poder Judicial, quienes dijo, están dispuestos a revisar el procedimiento de acuerdo con sus facultades y autonomía.
Esta reunión se llevará a cabo en cumplimiento a los familiares de los estudiantes normalistas que solicitaron al presidente conseguir una entrevista en la que participe como testigo.
Informó que la Ley de Amnistía no tiene que ver con el plan de paz para la seguridad, ya que la reinserción de las personas a la vida pública tiene que pasar por la autorización de las víctimas, valorar el tipo de delitos cometidos y el compromiso de no volver a cometer ilícitos.
“Vamos poco a poco en el proceso. La cadena se compone de bienestar de la gente y atención a los jóvenes; seguridad pública con la Guardia Nacional que ya está bien estructurada; campaña para disminuir el consumo de drogas; la no corrupción; respeto a los derechos humanos; coordinación de las instituciones, y control de las armas procedentes de Estados Unidos”, puntualizó.
Detalló que la iniciativa está dirigida principalmente a indígenas, mujeres o ancianos que no tuvieron una defensa adecuada o que no fueron asistidas por abogados, y que los delitos por los que pagan condenas no se relacionan con hechos de violencia. También incluye a presos políticos.
En resumen, dijo, la amnistía es para que salga la gente humilde de las cárceles, al tiempo que aclaró que no significa que haya impunidad.
Ante los sucesos recientes en Arabia Saudita y los ajustes en los precios del crudo, aseguró que México está protegido y que se mantendrá el compromiso de no aumentar los precios de los combustibles.
“No habrá variaciones en el costo de las gasolinas y tenemos asegurado el abasto. Ha aumentado la capacidad de refinación de las plantas de Pemex, las seis refinerías están produciendo más de lo que producían hace nueve meses”, abundó.
Adelantó que sus actividades para esta semana contemplan un reporte sobre la reconstrucción de los diferentes inmuebles afectados por los sismos de 2017 y que el viernes viajará a Mérida, Yucatán, para participar en la Cumbre de Premios Nobel de la Paz.