José Guadalupe Rocha Esparza 7 23-12-2020
Cantinflas es la quintaesencia de la picaresca, del albur, del doble sentido, de la gracia; el peladito, el hombre del pueblo, el hijo cazurro de la ciudad ladina y burlona de México; el iletrado que toma control del lenguaje como puede, entregando a la saludable carcajada del vulgo la demagógica fragancia de su vacuo confusionismo, de todo lo que quiere ser y no puede.
Mario Moreno Reyes representa al último cómico de carpa, mimo, actor, productor, guionista y comediante de relevante ingenio para hacer reír a la gente de sí misma, criticarla sin dañarla, satírico social del analfabeto, barrendero, boxeador, cartero, conserje, diplomático, gendarme, patrullero, político, portero, profesor, sacerdote, torero y el que baila descuajaringado.
En 53 películas Cantinflas cantinflea con estilo cantinflesco, cantinfleando como algunos discursos pronunciados por representantes populares, es decir, incongruentes, disparatados, con frases acantinfladas o huecas. “A’i está el detalle, chiquitos, nada más me voy, de mi cuerpo diosito se encarga”. “Parece que se fue, pero no es cierto”, epitafios. Fallece a los 82.
