Es Senador de la República y anteriormente fue Gobernador del Estado de Hidalgo y luego Secretario de Gobernación en el sexenio de Enrique Peña Nieto. Pero parece ser que el fuero legislativo no le alcanzará para impedir que la justicia le eche el guante.
Miguel Angel Osorio Chong, de muy triste memoria en Tamaulipas, está siendo investigado por la Secretaría de la Función Pública, por un incremento de 14 millones de peos en su patrimonio, sin justificación.
Al mismo tiempo, la Fiscalía General de la República, antes PGR, solicitó al poder judicial órdenes de aprehensión contra 19 colaboradores de Osorio en Gobernación en el área de la Policía Federal.
En el gobierno federal anterior, la Secretaría de Seguridad Pública fue eliminada y la Policía Federal pasó a depender de Gobernación. Los funcionarios del área, casi todos, se confabularon para cometer un desfalco estimado en 2,500 millones de pesos.
Se trata de recursos públicos desviados, en compras hechas de aviones, helicópteros, patrullas terrestres, armamento, municiones y otros materiales e instrumentos de trabajo, que se entregaban además al CISEN, penitenciarias y otras dependencias afines.
Osorio viajó cuando menos dos veces a Reynosa, para encabezar sendas reuniones de trabajo del Gabinete federal de Seguridad, con el Gobernador de la época, Egidio Torre Cantú.
El 13 de enero de 2014, por ejemplo, Osorio anunció en la ciudad fronteriza, con gran pompo y platillo, que traía bajo el brazo la solución para los problemas de violencia en el Estado, con un plan de tres ejes que consistía en:
1.- Desarticular en su composición a las organizaciones delictivas.
2.- Sellar las rutas de tráfico ilícito de personas, armas y dinero.
3.- Garantizar instituciones locales de seguridad que sean suficientes, eficientes y confiables.
Para llevar a cabo estas metas, Osorio Chong anunció una nueva división de la entidad para fines operativos. Las acciones se concentrarían en cuatro zonas:
1.- Frontera: Reynosa, Río Bravo, Valle Hermoso y Matamoros
2.- Costa: Altamira, Tampico y Madero
3.- Centro: Llera y Ciudad Victoria
4.- Sur: Mante, Antiguo Morelos y Nuevo Morelos
La nueva estrategia fue planeada por el gabinete de seguridad, el cual incluye a la Secretaría de Gobernación (Segob), la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), la Secretaría de Marina (Semar), el Centro de Inteligencia y Seguridad Nacional (Cisen), la Procuraduría General de la República (PGR) y la Comisión Nacional de Seguridad (CNS).
Otras acciones anunciadas por Osorio Chong eran en la instalación de cuatro fiscalías regionales por parte de PGR; reforzamiento de las bases de operación mixta en puntos carreteros, la revisión en los penales estatales, el énfasis en municipios prioritarios como Tampico, la revisión y clausura de giros negros y otros focos de actividades ilícitas y de violencia.
Además, el titular de Segob comprometió el uso intensivo de la inteligencia federal para desarticular organizaciones delictivas con mayor despliegue de personal especializado para fortalecer los recursos humanos, técnicos e inteligencia y resolver los problemas de la entidad.
Además, se ofreció atender especialmente el delito de secuestro, mediante grupos especiales con mayor capacitacion y tecnologia, así como el despliegue de elementos y tecnologia de vanguardia en cinco puntos estratégicos.
Las fuerzas federales realizarían patrullajes las 24 horas y los 7 días de la semana en las principales zonas urbanas, incrementando también las fuerzas federales para este fin.
En los límites de Tamaulipas con otras entidades, se llevarían a cabo operaciones especiales para acotar el esparcimiento del crimen a entidades colindantes, con el apoyo de los gobernadores Rodrigo Medina, de Nuevo León; Javier Duarte de Veracruz; y , de San Luis Potosí, Fernando Toranzo.
Para garantizar la confianza en las fuerzas estatales, se realizaría una depuración de la Secretaría de Seguridad Pública estatal, y un proceso de evaluación y depuración, que garantice una policía estatal honesta, capaz y eficaz, según prometió el secretario de Gobernación
Para reforzar esta actividad, prometió la creación del Instituto de Investigación y Preparación Policial de Tamaulipas, el cual iniciaría actividades inmediatamente, buscando policías mejor remunerados y con mejores prestaciones.
Eran todo mentiras.
La mayoría de los colaboradores del entonces Secretario de Gobernación, en el área de Seguridad Pública, eran corruptos, y fingían que cumplían sus instrucciones como en el caso de Tamaulipas, pero era una farsa.
Pero además, el nivel y la cuantía de las inversiones anunciadas no quedaban a cargo de funcionarios segundones, todo se hacía conforme a lo que ordenara el jefe, es decir, no se mandaban solos y si se cometieron irregularidades, él debió autorizarlas.
Por eso es inevitable que esos 19 ex funcionarios corruptos ahora en capilla, revelen todo el entramado armado para robar a la nación, bajo la batuta de su entonces jefe, Osorio Chong.
Según un reportaje publicado en la revista Proceso en 2010, Miguel Angel era investigado por relaciones peligrosas y lavado de dinero. La Secretaría de Gobernación de la época desmintió la nota, pero un año después la SIEDO lo exoneró de los presuntos nexos.
En 2015, Osorio entregaba seis millones de pesos mensuales, durante la campaña de seis meses, del candidato del PAN a Gobernador de Querétaro, Francisco Domínguez, y presuntamente dio otro tanto, al candidato de Baja California.
También es factible que Francisco García Cabeza de Vaca haya conseguido dinero de la dependencia federal que manejaba Osorio, para su campaña del año 2016, lo que confirmaría que hubo una traición del PRI a su candidato Baltazar Hinojosa Ochoa.
Actualmente, Miguel Angel Osorio Chong está a la cabeza de la mini-bancada parlamentaria, 14, incluido él. La integran cartuchos quemados como Beatriz Paredes, dinosaurios como Carlos Aceves, de la CTM, recomendadas como Sylvana Beltrones Sánchez.
El jefe de todos ellos, Enrique Peña Nieto, le ganó el campeonato de la impopularidad a Carlos Salinas de Gortari, por haber resultado ser como éste, ineficiente, inmoral, corrupto, traidor.
Con una diferencia obvia: Salinas tiene inteligencia política.
(Agencia de Servicios Informativos).
