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Dicho por Rocha

Por José Gpe. Rocha Esparza

A mano

marzo 15, 2021

José Guadalupe Rocha Esparza

Hoy, para adjudicar la autoría de un escrito a una persona, tendríamos que decir que es de “su dedo y tecla”. Antes decíamos que era de “su puño y letra”, precisamente al enviar o recibir una carta, mensaje o invitación escrita a mano, auténtica, de su propio autor, caligráfica, con letra cursiva, de buena letra, fina, impecable, elegante, limpia, sin errores o tachaduras.

Esa habilidad deseable se ha ido perdiendo y cada vez menos personas escriben a mano de manera agradable, romántica, personal y atractiva, destreza que aprendimos desde niños con orden, paciencia y muchísima práctica, haciendo que nuestra escritura se volviera costumbre y parte de uno mismo al empuñar la pluma, ajeno a la velocidad para mayor calidad.

Cuando sea posible y sin demerito de las comunicaciones electrónicas, una buena manera de hacer sentir bien, especial, querida e importante a una persona, es comunicándonos con ella en persona y si hubiere alguna limitante, hacerlo con interés y cariño mediante un manuscrito de “su puño y letra”, más cálido que un “email” o “whats”, rubricado con un “te espero”.