Vestigios porfirianos perduran en Jalisco hasta la fecha. Encarnación de Díaz, municipio de la Región Altos Norte, también conocido como “La Chona”, en honor al General por sus triunfos en la Intervención Francesa. El quiosco de la Plaza de Armas, la columna de la Independencia, Parque Agua Azul y la entrada del ferrocarril a Guadalajara son obras del Porfiriato.
Vacacionó en Chapala de 1904 a 1909 cada Semana Santa y Pascua, sito en la finca “El Manglar”, motivo para que las familias adineradas edificaran sus casas para veranear. Su amigo Joaquín Cuesta Gallardo lo recibía en las Haciendas de Atequiza y Maltaraña, ésta a las afueras de Jamay, que tenía 365 puertas y ventanas, una por cada día del año, legado porfiriano.
Segundo Díaz, primo hermano, lo recibía con frecuencia en el Palacio de las Vacas, sito en San Felipe 630, de arquitectura árabe y veneciana. La élite de Guadalajara le organizó un festejo de gala en diciembre de 1897, con un apoteótico recibimiento en la entonces sede de la UdeG. También se benefició por la muerte de Ramón Corona, adversario a la Presidencia.
Gral. Porfirio Díaz en Chapala.