Estilo napoleónico 2

 

Napoleón Bonaparte se consagraba largas horas a los asuntos públicos. Infatigable de las nueve de la mañana a las cinco de la tarde, continuando algunas veces desde las diez de la noche hasta las cinco de la madrugada, nunca cansado su espíritu ni aminorada su inteligencia, aun en medio del agobio corporal, ejercicios violentos o hasta en sus momentos de cólera.

Tenía siempre a la vista tres estantes, con unos 20 cuadernos voluminosos cada uno, abiertos siempre a todas horas. El primero de carácter militar, con minuciosas cartas topográficas, planos detallados de todas las plazas fuertes, así como la distribución de sus enteras fuerzas de mar y tierra, arsenales, almacenes, reservas, víveres, equipos y municiones en detalle.

El segundo de carácter civil, cuadernos que comprendían la recaudación, gastos, deudas, pensiones, obras públicas y nómina, que incluía número de empleados, punto de residencia, categoría, atribuciones y sueldo. El último, un diccionario biográfico de cada personaje notable por localidad, su cumpleaños, carácter, familia y necesidades. Un posesor con fuerza gala.